Herencias y testamentos: claves legales que debes conocer

¿Sabías que gestionar mal una herencia puede generar años de problemas entre familiares? Las Herencias y testamentos son decisiones que afectan a muchas familias. El testamento es una herramienta fundamental para garantizar que la voluntad del fallecido se respete. Sin embargo, tras un momento tan delicado como el fallecimiento de un ser querido, surgen numerosas dudas sobre cómo gestionar la herencia. ¿Cómo se dividen los bienes? ¿Qué implicaciones legales existen en el proceso? Estas preguntas son muy frecuentes y más aún cuando no existe un testamento claro.

Por ello, te animamos a leer el siguiente artículo en el que resolvemos estas dudas y te contamos las claves legales que debes conocer si estás ante un proceso de sucesión.

¿Qué es un testamento y por qué es tan importante dejarlo preparado?

El testamento es un documento legal que garantiza que la voluntad del fallecido se cumpla. Imagina por un momento que, tras tu fallecimiento, tus seres queridos se enfrentan a una batalla legal. ¿No sería mejor dejarlo todo claro antes? Además, el testamento no solo ordena el reparto de bienes, sino que protege el legado y los valores personales. Por eso, contar con un documento legal bien estructurado es fundamental para prevenir futuros conflictos familiares y garantizar que cada bien sea destinado correctamente.

Asimismo, una correcta asesoría legal te permite afrontar cada situación con más confianza gracias a la ayuda de expertos en derecho civil.

¿Cómo se divide una herencia con y sin testamento?

Una de las dudas más frecuentes que recibimos en Sánchez Mollá Abogadas es si una herencia se puede dividir libremente. La respuesta es sí, pero depende de si existe un testamento.

En caso de no haber testamento, se aplica la sucesión intestada. En este caso, la ley establece un orden de herederos, que suele incluir primero a los descendientes, luego a los ascendientes y, si no existen, a los colaterales como hermanos y sobrinos. En este tipo de sucesión, también conocida como sucesión legítima, es la ley la que determina cómo se distribuyen los bienes de la persona fallecida.

En definitiva, el primer paso para dividir una herencia sería distinguir entre los bienes gananciales (los de los cónyuges) y los bienes primitivos (que pertenecen a uno de los cónyuges). Para asegurarnos de que la división se hace correctamente, es clave saber qué bienes entran en cada categoría. Si bien los bienes se pueden repartir de manera proporcional, hay ocasiones en las que no hay un acuerdo entre las partes y pueden surgir conflictos. En estos casos, podríamos contar con el contador-partidor para asegurar una división justa

La figura del contador-partidor

Cuando los herederos no logran ponerse de acuerdo, entra en juego la figura del contador-partidor. Esta persona se encarga de valorar, liquidar y repartir los bienes de forma justa y su intervención puede ser la clave para evitar rupturas familiares.

En situaciones más complejas como herencias con inmuebles alquilados o arrendamientos, su papel es aún más importante.

Aunque contar con un contador-partidor no es siempre obligatorio, su intervención puede evitar conflictos especialmente entre familias donde hay varios herederos o cuando los bienes son difíciles de repartir.

¿Qué es la Cautela Socini y por qué puede proteger tu herencia?

La Cautela Socini es una medida que tiene lugar cuando los herederos no están seguros de la cuantía de los bienes de la herencia. ¿Qué ocurre cuando la herencia incluye deudas o bienes cuyo valor se desconoce?

Esta medida se puede adoptar para proteger a los herederos y permite que la división de la herencia se realice de forma provisional, permitiendo ajustar las cantidades finales una vez se confirme el valor total de los bienes. Esto garantiza que en caso de que el valor real sea inferior al esperado, los herederos no sufran una pérdida excesiva y asegura que la herencia no quede incompleta ni mal repartida.

Esta figura es especialmente útil cuando los bienes incluyen elementos difíciles de valorar como acciones empresariales.

Impuesto de sucesiones: lo que debes saber para evitar sanciones

Otro aspecto que considerar en el proceso de herencia es el impuesto de sucesiones. En España, este tributo debe liquidarse una vez se ha aceptado la herencia y los plazos varían en función de la comunidad autónoma en la que se lleve a cabo el proceso.

En España, el impuesto de sucesiones debe liquidarse en un plazo de 6 meses tras el fallecimiento. Ten en mente que superar ese plazo sin solicitar prórroga puede acarrear importantes sanciones, por ello, desde nuestro despacho en Alicante, te ayudamos a tramitarlo correctamente.

Cómo podemos ayudarte en Sánchez Mollá Abogadas

Si estás enfrentando un proceso de herencia o deseas redactar tu testamento con garantías legales, en Sánchez Mollá Abogadas estamos aquí para apoyarte. Además, nuestra experiencia en mediación familiar nos permite abordar cada caso desde una perspectiva legal y humana.

Contacta con nosotras para recibir una asesoría personalizada. Tu tranquilidad y la de los tuyos es lo más importante.

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