Divorcio en Alicante: cómo afrontarlo legalmente con éxito
¿Estás pasando por un divorcio o estás planteándote iniciar el proceso? Este es, sin duda, uno de los momentos más sifíciles a nivel emocional y legal en la vida de una persona. Desde la aprobación de la Ley 15/2005, en materia de separación y divorcio, el proceso se ha simplificado eliminando la necesidad de alegar causas específicas y permitiendo el divorcio directo sin previa separación, siempre que hayan pasado 3 meses del matrimonio.
Afrontar legalmente un divorcio con éxito es posible, siempre que estés bien acompañado desde el punto de vista jurídico. En Alicante, contar con una abogada especializada como Sara Sánchez Mollá puede marcar la diferencia entre un proceso traumático o una transición ordenada y justa. Con este artículo no solo pretendemos ayudarte a tomar mejores decisiones, sino también a recuperar tu equilibrio personal y económico.
En este artículo descubrirás cómo afrontar esta etapa con las herramientas legales adecuadas, qué derechos te amparan y cómo evitar errores comunes que pueden complicar aún más la situación. Imagina por un momento que puedes tomar el control del proceso con seguridad, sabiendo que cada paso está apoyado por una estrategia jurídica bien diseñada.¿Qué tipos de divorcio existen y cuál te conviene más?
En España existen 2 tipos de divorcio: divorcio de mutuo acuerdo y divorcio contencioso:
El divorco de mutuo acuerdo es el procedimiento legal en el que ambas partes acuerdan de manera voluntaria la disolución matrimonial y las condiciones asociadas como la custodia de los hijos, la pensión alimenticia y el reparto de bienes.
El plazo de duración del divorcio de mutuo acuerdo en España, suele resolverse entre 2 y 3 meses desde la presentación de la demanda hasta la obtención de la sentencia. Con respecto al coste medio, oscila entre 750 y 1200 euros incluyendo honorarios de abogados y procuradores. Si no hay hijos menores, una opción podría ser el denominado divorcio exprés notarial que cuesta a partir de 200 euros por persona.
El divorcio contencioso se produce cuando no hay acuerdo entre las partes, por lo que se necesita la intervención judicial para establecer las condiciones del divorcio. Este proceso de divorcio puede ser largo y complejo y una vez solicitada la demanda de divorcio, la parte demandada tiene un plazo de 20 días hábiles para responder.
El plazo de duración puede variar, pero suele extenderse entre 3 meses y 1 año, según la complejidad del caso y los plazos judiciales.
Los costes suelen ser elevados, comenzando normalmente desde 1500 euros y pudiendo superar los 2.000 euros en el caso de tener que realizar un proceso judicial más extenso. En caso de haber hijos menores el coste puede ser más elevado llegando a alcanzar cifras de hasta 10.000 euros debido a trámites como la custodia compartida o la manutención.
Aspectos legales clave a tener en cuenta durante un divorcio
Durante un divorcio no solo se decide el final del vínculo matrimonial. Se abordan cuestiones de enorme trascendencia legal que impactarán directamente en tu vida futura. Algunos de los aspectos más relevantes incluyen:
- Custodia de hijos menores: puede ser compartida o exclusiva, y debe responder al interés superior del menor.
- Uso de la vivienda familiar: se asigna generalmente a quien tenga la custodia, pero existen matices importantes.
- Pensión compensatoria: en casos donde exista desequilibrio económico entre los cónyuges.
- Liquidación del régimen económico: ya sea gananciales o separación de bienes.
- Reparto de deudas y obligaciones comunes: incluidas tarjetas revolving u otros préstamos conjuntos (ver tarjetas revolving y cláusulas abusivas).
Analizar cada uno de estos puntos con detalle es fundamental para construir una estrategia legal sólida y coherente. Una decisión mal tomada hoy puede repercutir durante años. En nuestro despacho te ayudamos a prever escenarios futuros, negociar de forma eficaz y proteger tus intereses y los de tus hijos.
¿Qué documentos necesitas para iniciar el proceso?
El primer paso para comenzar el proceso de divorcio es reunir toda la documentación necesaria. Esta fase es crucial, ya que de ella depende que el trámite sea rápido, claro y sin obstáculos innecesarios. Entre los papeles que deberás presentar están el certificado de matrimonio, certificado de nacimiento de los hijos (si los hay), copia del DNI de ambos cónyuges y, en caso de divorcio de mutuo acuerdo, el convenio regulador firmado por ambas partes. También es muy útil recopilar documentación financiera actualizada, como nóminas, declaraciones de la renta, escrituras de inmuebles, hipotecas, préstamos personales, extractos bancarios y cualquier otro dato económico que pueda influir en la distribución de bienes o en la fijación de pensiones.
Una correcta preparación documental no solo agiliza el proceso judicial, sino que permite anticiparse a conflictos potenciales que podrían surgir más adelante. Por ejemplo, si existen deudas conjuntas o reclamaciones económicas pendientes entre los cónyuges, puede ser conveniente resolverlas previamente mediante una reclamación de cantidad. También es recomendable analizar la validez de productos financieros contratados durante el matrimonio, como tarjetas revolving o préstamos con cláusulas abusivas, ya que su impacto económico podría condicionar el reparto patrimonial. Cuanta más previsión tengas al inicio, menos sorpresas encontrarás durante el camino.
¿Cómo afecta un divorcio a los hijos menores?
Cuando hay hijos menores de edad, el divorcio adquiere una dimensión más delicada. En estos casos, el juzgado evalúa siempre qué es lo mejor para ellos, independientemente de lo que las partes propongan. Por ello, es fundamental presentar un plan de parentalidad sensato, equilibrado y realista. La custodia compartida es la opción más habitual hoy en día, pero debe estar justificada y ser viable para ambas partes.
Además de la custodia, el régimen de visitas, las vacaciones escolares, la pensión de alimentos y el uso de la vivienda familiar son temas que se deben acordar y formalizar. Si hay desacuerdo, será el juez quien decida. En estos casos, es vital contar con una abogada que sepa exponer claramente tu posición, demostrar tu implicación como madre o padre, y proteger el vínculo con tus hijos. También te ayudamos si estás lidiando con conflictos posteriores como problemas con la vivienda familiar o cambios de residencia.
Contacta con profesionales para iniciar tu nueva vida
Si estás atravesando un divorcio, lo primero que necesitas es claridad. Dar el primer paso puede ser difícil, pero también liberador. Solicitar asesoramiento jurídico profesional te permitirá conocer tus derechos, anticiparte a los problemas y actuar desde la seguridad, no desde la confusión. Cada situación es única, y por eso en nuestro despacho te escuchamos, te orientamos y caminamos contigo en cada fase del proceso.
Si además te estás planteando iniciar una mediación legal, iniciar una reclamación de deudas o proteger tus intereses en una empresa o negocio, también podemos ayudarte con un enfoque legal completo. Muchas veces, el divorcio no viene solo: hay conflictos con socios, deudas pendientes o incluso situaciones de tensión con proveedores o clientes que requieren ser abordadas de forma inteligente y estratégica.
Contar con un asesoramiento legal integral te permite tomar decisiones con visión de futuro, sin descuidar ninguna parte de tu patrimonio personal o empresarial. ¿Y si hoy fuera el primer día de tu nueva vida? Un momento de cambio puede convertirse en una gran oportunidad si lo enfrentas con las herramientas adecuadas.